Cartas bajo la Luna

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Me reconforta pensar que has sido feliz,
y que yo he sido participe de esa felicidad
Me reconforta saber que has vivido plenamente
y que yo he podido disfrutar esa vida contigo
Me enorgullece tanto decir que eres mi padre
mi payasete, mi papi.
Pero no puedo remediar el rebelarme y sentir tanta impotencia
solo puedo estar contigo y demostrarte mi amor
!ojala eso te diera fuerzas para seguir adelante¡
Me reconforta el verte ahora tranquilo pero estoy triste, muy triste...
Papá te quiero.

     Me hiciste sentir,

       volver a vivir.

      Alegras mi sonrisa,

      llenas mi tiempo,

      eres pasión,

      eres día en mi noche,

      eres palabras en mi boca,

      eres sangre en mis venas,

      y  paz en mis penas.

     Amarte es sentir   

    y sentirte es amarte.

.

       

La historia de las galletas de la suerte, también llamadas galletas de la fortuna, se remonta a los siglos XIII y XIV durante los cuales China estaba ocupada por los mongoles.
Cuando Chu Yuan Chang, un revolucionario patriota de la época, hací­a planes para un levantamiento popular contra los mongoles, su principal preocupación era encontrar una forma de comunicar la fecha del levantamiento sin alertarlos.

Sabiendo que a los mongoles no les gustaba la pasta de nuez de loto con la cual se rellenaban los tradicionales “pasteles de luna o mooncakes” usados por los chinos en las fechas especiales, decidió esconder en el centro de los pasteles mensajes secretos de papel de arroz informando a los chinos de la fecha de la rebelión.
Chu Yang Chang, fingiendo ser un sacerdote taoista, logró entrar a la ciudad amurallada ocupada, cargado con pasteles de luna que contení­an las instrucciones para coordinar el levantamiento de cuyo triunfo se formó la base de la Dinastía Ming.
Nació así­ la tradición de dar mensajes dentro de pasteles y se convirtió en una forma popular de expresar deseos de bienestar o de buena fortuna en ocasiones importantes como la celebración del Festival de la Luna que se celebra regularmente.
Se cree que esta leyenda inspiró a los chinos que trabajaron durante la construcción del Ferrocarril Americano a través de la Sierra Nevada hacia California en Estados Unidos en 1849. El trabajo era duro y los placeres muy pocos en esos campamentos aislados. Al no poder contar con pasteles de luna para la celebración del Festival de la Luna, y al tener sólo galletas decidieron poner mensajes felices dentro de ellas para compartirlas, así nacieron las GALLETAS DE LA FORTUNA o FORTUNE COOKIES.
Con el tiempo, después de la fiebre del oro y de terminar la vía férrea, la tradición se consolidó y se convirtió en una pequeña industria dentro de la comunidad china residente en San Francisco. Hoy es imposible imaginar tener una comida oriental en Estados Unidos o Canadá y no terminarla con una galleta de la suerte.
A continuación os enumero unos cuantos de mensajes que suelen salir en las galletas de la fortuna, normalmente son proverbios chinos aunque no siempre como por ejemplo:
"El tic tac de los relojes parece un ratón que roe el tiempo." - Alphonse Allais.
"Cumplamos la tarea de vivir de tal modo que cuando muramos, incluso el de la funeraria lo sienta"- Mark Twain. (1835-1910) Escritor y periodista estadounidense
Algunos dedicados al Amor:
"El amor sin admiración sólo es amistad."- Aurore Dupin
"El amor no tiene cura, pero es la única medicina para todos los males"- Anonimo
"Quiéreme cuando menos me lo merezca,porque será cuando más lo necesite"- Anonimo
"Nadie tiene dominio sobre el amor, pero el amor domina todas las cosas"- Anonimo

Cuando se es madre, nunca se está sola en sus pensamientos. Una madre siempre deber pensar por doble - una vez por ella y otra por su hijo y tú, mama, siempre velas por las tres, aunque estes cansada y  triste sacas fuerzas de donde no las tienes para levantarnos a nosotras  con una sonrisa.
 
!Mi madre¡, que orgullosa estoy de pronunciar estas palabras porque eres tú. Te quiero mama.

"Y en ese momento el reloj de la estación dió las doce del mediodía"

- El tren se estaba retrasando. Llevaba esperando más de media hora y cada vez estaba más nervioso. Había quedado en ir a recogerla a la estación pero tenia muchas cosas que hacer, además ya era viejo y debía cuidarse un poco; en esa época del año hacia un frío que, como decía ella -"no merece la pena ponerse tanta ropa, total siento el mismo frío"-. Al recordar ésto el viejo se rió y una señora que estaba sentada a su lado, le miró extrañada y con cara de pocos amigos. El viejo al ver la cara que ponía se rió con más ganas sintiéndose muy feliz aunque nervioso por la larga espera.
 Habían pasado ya cuatro horas desde que el tren debía haber llegado, el viejo daba vueltas por el andén -¿Y si no era hoy cuando venia?. No, le dijo que seria hoy, ella nunca le mentía y una broma así no se la haría jamás.-
Cansado de andar se sentó en un banco y comenzó a recordar anécdotas de su vida con ella, porque así era la única forma de que se le pasara el tiempo rápidamente si no estaba con él. -¡¿Cúando llegaría el dichoso tren?!.
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- "¡ Mamá, ese señor se ha caído del banco!"
- "Dejale hijo, estará borracho."
-"Se equivoca señora"- dijo el conductor de un tren que acababa de llegar.
-"¿Como dice...?
- "Que este viejo no es, mejor dicho, no era un borracho"- decía esto mirando hacia la ambulancia donde unos enfermeros metían el cuerpo, ya frío, del viejo. -"Este hombre llevaba varias semanas viniendo todos los días a la estación a la misma hora, las doce del mediodía, para recoger a su esposa. Esta murió hace casi un més en un hospital de Madrid. Cuando le dieron la noticia al anciano, ya que no pudo acompañarla porque también estaba muy delicado de salud y recién operado, dijo que era mentira y que ella llegaría muy pronto al pueblo...se lo había prometido."

Así es como el viejo acudía todos los días a la estación para buscarla, yéndose a su casa habiendo oscurecido ya y diciéndose a si mismo, esperanzado, que seria al día siguiente cuando vendría.
Ahora, por fin, ha llegado el tren que tanto esperaba y la llevaría con ella...el último tren...y en ese momento el reloj de la estación dió las doce del mediodía.

No, no es un trabalenguas, a simple vista puede parecer que no tiene mucho sentido pero más lejos de la realidad. Alguien me dijo una vez que para conocerse uno mejor a si mismo, resolver tus inquietudes o simplemente para desahogarte, si nos sentamos y escribimos en un papel todo lo que se nos pase por la cabeza, aunque puede parecer una tonteria, ayuda un montón. Probad a hacerlo y vereis como tengo razón.
¿Cual es la razón de que este sistema funcione? Porque los pensamientos son muy rapidos y muchas veces no nos paramos a reflexionar lo suficiente, "las palabras se las lleva el viento", pero si esas palabras las trasladamos a un simple parpel, cobran un valor añadido: podemos leer nuestros pensamientos.
Muchas veces simplemente por el hecho de escribirlos ya nos resulta de gran ayuda, ¡nos liberamos de ellos! pero si a eso le añades que luego puedas volver a leerlos (a veces te sorprendes incluso: ¡¿esto lo he escrito yo?!),te ayudará a resolver más cosas de las que tu te crees.
Este blog, de hecho, parte de esa idea. Animaros, nadie os va a ayudar más a vosotros que vosotros mismos.

La vida pasa sin darnos cuenta y más en estos tiempos que corren donde el ritmo de vida es frenetico. Nos enfrascamos en el dia a dia y ni siquiera nos paramos a pensar si  estamos haciendo y viviendo lo que realmente queremos. Nos agobiamos, desesperamos y no nos damos cuenta muchas veces de disfrutar de esos pequeños detalles que en definitiva son los que nos hacen sentir mejor e incluso ser más felices.
Me gusta la Luna, en cierto modo se parece a mi, la Luna Llena tan bonita y pletorica de luz me recuerda a cuando yo me siento así y la Luna Nueva, tan insignificante y apagada, por desgracia, también me recuerda a mi en muchos momentos.
Yo intento ser siempre esa luna creciente aspirando a llegar a ser la Luna Llena y lo intento precisamente disfrutando de esos pequeños detalles de los que os he hablado antes.
Os animo a que busqueis también en vuestra vida cotidiana esos pequeños detalles, momentos concretos...una canción, una sonrisa, un te quiero...que os hagan sentir mas felices aunque sea solo por un momento.

Es verdad que, por desgracia, las noticias pesimistas son las más frecuentes en este mundo caotico en el que vivimos. Da igual en el punto del hemisferio que te encuentres, siempre va a haber una mala noticia...pero que pasa con las buenas noticias. ¿es que no hay?, noticias de esperanza, de avances medicos, humanas...¡ claro que existen! pero siempre quedan rezagadas a un segundo plano. Pues eso se acabó. Las noticias buenas, alegres y positivas van a ser las protagonistas por una vez y espero que, en cierta medida nos hagan reflexionar a todos y nos ayude a ser un poco mejor como personas...si todos pusieramos solo un poco de nuestra parte quizá las cosas cambiasen.
En Cartas bajo la Luna me he propuesto plasmar este tipo de noticias de todo el mundo.Os iré informando...